Francia: "El fin de un sueño"
Lo de Francia es tal vez el fin de un sueño que entusiasmó a muchos durante siglos, y que ahora con la crisis económica europea parece la culminación de los sueños de millones de personas que creyeron que en este país y en el continente europeo lograrían conseguir los sueños de libertad que están enraizados en esos conceptos que mitificaron desde la revolución francesa los enciclopedistas, y que a pesar de lo vivido en la segunda guerra mundial ante el dominio del fascismo en el continente, a pesar de Petain haber sido considerado como traidor por permitir que los alemanes gobernaran en su país, y después de su liberación que comenzó con la invasión de Normandía por los aliados y la lucha que los seguidores de Charles de Gaulle dentro de su propio país fueran los inspiradores de la derrota alemana, sus ideales moldearon a millones de personas en la cultura occidental.
Ahora con las nuevas elecciones que se avecinan con una nueva vuelta, en la que un Sarkozy pretende continuar gobernando haciendo eco del eslogan de xenofobia y chovinista de Mariane Le Pen, quien es considerada como la más recalcitrante de los grupos políticos de derecha, para impedir que los socialistas de Hollande regresen al poder, esta luha por conseguir la mayoría del electorado francés, nos dejan sentir el fracaso de una política que surgió tras sus ambiciones ciertas de constituirse en un continente que podría emular al desarrollo de los Estados Unidos y Canadá en nuestro hemisferio.
Surgidos de la desvastación de la segunda guerra mundial bajo la ayuda del plan Marshall, todo en su desarrollo económico y social parecía que iba muy bien. Pero esta crisis que se ha desencadenado después que Grecia no pudo pagar su deuda económica, y que a su paso se llevó a otros países como Italia y Holanda, terminando en España, en una quiebra total que amenaza al mundo entero en otra nueva crísis capitalista, en las que los mismos Estados Unidos todavía no terminan de paliar sus propia quiebra bancaria, e incluso también pudieran afectar a la misma China que se ha constituido en la segunda economía mundial.
La crisis de Francia afecta más porque en cierta medida allí se gestaron no solo los sueños de los enciclopedistas en la época de la revolución francesa, sino que en todos estos años después de su calvario en Argel cuando tuvieron que resignarse a dejar sus proyectos colonialista mientras hablaban de libertades, y que son las ideas de muchos intelectuales que todavía se hacen sentir en el mundo.
Su influencia ideológica en los partidos que formaron la socialdemocracia que también isnpiraron las divergencias dentro de los mismos partidos comunistas, cuando irrumpieron con sus ideas sociales en la que abolieron dentro de sus programas partidistas la abolición de “La dictadura del proletariado”. El famoso mayo francés que inspiró películas y libros sobre Daniel “El Rojo” y todos los sucesos que se desencadenaron, toda esa elite de intelectuales que como Marcuse criticaron la alienación en el mundo capitalistas, las ideas de Sartre sobre el existencialismo con su “Nausea” , y el feminismo encarnado por su mujer Beavoire que nos hicieron creer en esos sueños que se inspiraron en las ideas de libertad porque el consumismo capitalista permitía conseguir los logros económicos que aquí en nuestros países no se daban. Su cine que hizo que muchos creyeran que yendo a París podrían paliar sus ambiciones intelectuales y económicas, incluso el sueño de muchos estudiantes de esa época de estudiar en la Sorbona, o recordar a Picasso en los cafés y tertuliadoeros que todavía dicen que existen, hicieron que en estas últimas décadas todos quisieran así sea de paso, soñar con lo que sus escritores y sus artistas nos transmitían en sus sueños.
Y todo se derrumbó. El auge del comercio de la droga, la llegada de millones de inmigrantes de los antiguos países socialistas, la llegada de todo un conglomerado de gentes llegadas del Africa, y con ellos su religión musulmana que hicieron mella en las contradicciones que tienen en sus países de origen, la migración de muchos latinoamericanos que creyeron conseguir allí otro sueño muy parecido al de los americanos en nuestro continente con los Estados Unidos, ahora con esta crisis en la que Francia a llegado a una transacción con Alemania con todo un programa económico para sacar a la comunidad europea del déficit fiscal que los afecta, y que su desenlace depende del que salga triunfador en la próxima contienda electoral. Sarkozy no quiere perder el poder. Y Hollande quiere replantear el problema de la deuda para que no los lleve completamente al empobrecimiento ante la austeridad que propone Alemania.
Y sin embargo, esos sueños que generaron ya no lo son. Todo cambió en unos pocos años. Europa también se sumió en la pobreza que incluso la Gran Bretaña también marcha en la misma vía de sus coterráneos.
Y muy a pesar de su alto desarrollo económico y social parece que afectará a millones de personas, y a sus sueños que tanto nos satisficieron con sus ideas. Es el fin de todo un sueño.
Y tal vez el comienzo de otros.
