Terapias para alcohólicos

Tal vez no me entienda, y aunque también pueden ser para aquellas personas que en algún  momento de sus vidas caigan en esas redes infernales idénticas a los que nos hacen esos brujos que son especialistas en vigilancias con fines muy disimulados y que actúan como títeres en esas obediencias de las que hoy conocemos como ciudadanas, y así nos digan otras cosas;  que con sus artimañas pueden enloquecer o crear la zozobra en gentes que no saben de estos trabajos de sicología hasta que los hacen morir de un susto, o ver gritando como locos en las calles,  ya que existen maneras  sutiles de alterar la siquis de estos, a los que tienen enredados con sus vulgares trabajos de cofradías de familias  mediante  amenazas sutiles, que pueden confundir a cualquiera;  y que las hacen a propósito  en medio de esos laberintos siquicos donde los pueden alterar con solo conocer sus hábitos mentales,  o crear dentro de sus entornos los fantasmas del delirio de la persecución, ya sea con un atraco o un accidente, para que les sigan sucediendo cosas aparentemente extrañas  con el fin de que crean que en esas seguidilla son de malas en la vida.

Y las hacen contra una persona en particular a sabiendas que la tienen enredadas mediante sus diatribas y artimañas del imaginario colectivo con recursos que van desde las provocaciones ladinas en ese difícil arte de saber provocar para sugestionar en grupo, aparentando seguridades ciudadanas que no son más que el festín de los malévolos que rondan en sociedades enfermas como las nuestras.

 En estos tiempos es normal cuando se sabe que la corrupción ronda por donde se le mire desde lo más alto del Estado hasta los más bajos estratos sociales incluso  con el sidrome del coronavirus que nos afectó a muchos con el stress, y más que el mismo infierno que algunas familias viven en sus propios entornos, en donde los recuerdos de lo sucedido en las calles le hacen creer que todo es producto de una persecución  orquestada. No se si hayan leído al "Flautista de Hamelin" que versa sobre hechos sucedidos en Alemania en la época de la peste negra que también como producto de los malos hábitos de higiene de los hombres era transmitida por las ratas, y que asoló a Europa y a gran parte del mundo conocido de entonces con millones de muertos, y en el mismo lapso de tiempo que dicho relato trascendió con hechos que sucedieron en aquella población alemana en que un flautista se apareció ante el pedido del Rey que pidió ayuda para que si alguien lo ayudaba a liberarse de los roedores y de la peste negra que estos transmitían y que como calamidad azotaban a la población, lo premiaria con un fajo de monedadas de oro; y digamos más bien que con una fortuna en oro. Una calamidad pública porque la peste duró casi 200 años. Así fue como apareció el flautista que encantó a las ratas con sus melodías, e hizo que lo siguieran hasta el rio que pasaba por un lado de la población, y adonde las guió con su música para que se ahogasen. Y que después cuando regresó a pedir el premio al rey, este se la negó en son de burla, al ver que su imperio estaba ya libre de  estas. 

 Y es ahí cuando comienza la tragedia porque entonces el flautista  con sus sonidos musicales hipnotiza a los niños de aquel pueblo con sus melodías y hace que algunos lo sigan encantados (sugestionados más bien) y llevándolos a unas grutas desconocidas  por todos, para así cobrar al rey  y al pueblo su incumplimiento Algo parecido a lo que hacen ahora grupos extremistas en África con las niñas que secuestran,  a quienes sólo  devuelven cuando los gobernantes  pagan sumas exhorbitantes en dinero para que las liberen.  Ficciones literarias que se hacen reales  y que en este caso a pesar de ser una leyenda coinciden con hechos sucedidos en donde también los humanos los pueden convertir en mascotas para asustar a los incautos desprevenidos con el fin de provocarle algún temor, o hacer con esto una de esas terapias que por estos tiempos son tan comunes en nuestras sociedades. En fin, el Flautista de aquella región alemana pudo existir, que incluso algunos historiadores concluyen que debió de suceder el secuestro de algunos de esos niños por algún hipnotizador especializado en sugestionar a comunidades enteras  con sus hábiles argucias musicales, y es posible que haya dominado sus mentes mediante esos intrincados subterfugios y engaños de las conductas humanas donde la voluntad se ve doblegada por mendaces acostumbrados a estos tipos de trabajos con fines que van desde el hostigamiento y la complicidad de cofradías secretas en medio de vigilancias que pueden ser publicas y privadas hasta provocar el miedo o la muerte de particulares. Trabajan en grupos cerrados de familias donde estos personajes existen Es más, pueden producir los mismos efectos de  las tablas de weija (Guija) con las que los creyentes creen que pueden ser intermediarias para hablar con los supuestos espíritus del más allá, y de las que hace pocos años se tuvo noticias en algunos colegios de esta y otras ciudades de Colombia, y que en realidad solo son parte de esas sugestiones en las que a veces los hombres se confunden  por ser supersticiosos, pues con sus lenguas pueden hacer matar a mas de un incauto que no sepa de estos viles trabajos de sicología, y que según  parece a más de un alcohólico se las han hecho por obra de autoridades.

O mejor, no sé sí se acuerdan de la invasión de los marcianos ideada por Orson Welles en los Estados Unidos, y que a pesar de haber promovido en los medios de comunicación que todo era no más que pura ficción, sus congeneres creyeron  que en verdad la tierra estaba siendo invadida por los marcianos, muy a pesar de sus mentiras que hacían parte de la ficción creada por este,  produciendo el mayor pánico colectivo del que se tenga noticia en Norteamérica, y que en la vida real enloqueció a más de uno de los suyos por el pánico colectivo. Así son las terapias para alcohólicos y en las que según parece hacen parte de esas guerras sicológicas con las que algunos de estos agentes terminan utilizando  en sus proyectos con el fin de atormentar a personas indefensas, y así apaciguar sus espíritus siniestros en estos países donde la violencia de las palabras son utilizadas por muchos para  dividir y no para construir, hablando mal del prójimo. Algo parecido a lo sucedido con la actual pandemia del Coronavirus 19.

Si no ha oído hablar de estas terapias contra alcohólicos o  personas solitarias, aisladas, o extraviadas por alguna sustancia sicóticas que acompañadas con estos tipos de trabajos,  siempre es bueno que los intuya antes de que algunos con estos trabajos les hagan creer que es obra de lo que el común de las gentes llaman de brujerias

No me crea. Al fin y al cabo esto es una ficción. Tampoco creo en brujas, pero que las hay las hay, eso dicen por ahí algunos vibarachos para despistar a los incautos que caen en sus redes fantasmales. Son los mentirosos de nuestro tiempo, que nos engañan con sus fantasiosas especulaciones sobre estos. Hablan mas de la cuenta con el fin de... Cualquier parecido con la realidad es pura ficción.